El mejor tratamiento es la prevención
En el caso de los traumatismos hemos asistido en las últimas décadas a una marcada reducción de fallecidos y heridos. La disminución en los últimos años de la siniestralidad en las carreteras nos anima a no cesar en el esfuerzo preventivo. Por ello hay que seguir incidiendo en la necesidad de utilizar coches seguros y bien mantenidos, de usar el cinturón de seguridad, de observar los límites de velocidad y de abstenerse de beber alcohol. Éstas entre otras, son medidas con un efecto acumulado extraordinario. La seguridad en el puesto de trabajo y la protección y prudencia en la práctica deportiva completan el índice de apartados que debemos desarrollar para prevenir traumatismos craneales.
* Vídeo propiedad de la Fundación Freno al ICTUS
En el caso de los ictus, la lucha contra la obesidad, la hipertensión arterial y el tabaquismo son los ejes de la prevención. Para ello la educación en hábitos saludables desde la infancia es clave. Es interesante consultar esta breve guía de prevención de ictus que utilizamos en el Servicio tanto para la prevención del primer ictus como para la prevención secundaria.